lunes, 23 de abril de 2012

CRÓNICA UMSDT

Sois muchos los que me habéis pedido que haga la crónica de esta carrera, la UMSDT, una carrera que por su recorrido y dureza nunca te deja indiferente.

Para mi ha sido la edición más dura que he hecho, nunca había sufrido tanto en una carrera para llegar a la meta y os aseguro que he sufrido en muchas.

Ante nada felicitar a los grandes vencedores tanto de la Ultra como de la Trail en categoría masculina y femenina, que representación más lujosa que ha tenido esta carrera, le da más prestigio si cabe.

Los números hablan por si solos, la cantidad de retirados en esta edición demuestra su dureza, varios factores hicieron que la gente fuera abandonando durante la prueba quedando sus sueños destrozados momentaneamente, digo momentaneamente porque por suerte estas carreras se repiten cada año y uno puede recuperarse y volver a abordarla con mas fuerza y energía.

Por mi parte esta carrera me ha hundido aún mas si cabe, comencé con un buen planteamiento y una buena estrategia para disfrutar de esta carrera, mi baza era saber cual es mi ritmo y conocerme palmo a palmo esta carrera por lo que era difícil que fallara.
Los km iniciales los hice con Carmen, Sebastià y Alex, cerca teníamos a Payeras, Marc... enseguida notamos que esa noche iba a ser dura, no sólo no hacía frío sino que hacía calor, mucha humedad y no corría el aire por lo que sudábamos más de lo normal. ante ello nos pusimos a beber para contrarrestar y seguir sumando Km.

Casi en la cima de S´Esclop me encontré con Biel Vallespir que tenía problemas digestivos, delante de el me junte con unos compañeros de Alquezar con los que hice parte de la bajada hasta Estellenchs, les iba contando lo que seguramente encontrarían en los avituallamientos... Pase por Estellenchs bastante bien y seguí solo en dirección a Banyalbufar, de vez en cuando adelantaba o me adelantaba algún conocido con los que intercambiábamos algunas palabras.
Yo no tuve ningún problema en la parte de Planisi pero parece ser que alguien debió quitar alguna cinta ya que varios amigos se perdieron por ese punto, es una lástima que la gente pueda hacer estas cosas, da mucha rabia.

Mi alegría fue al llegar al Port des Canonge que me encontré a mis amigos de batallitas anteriores: Samu, Oscar... este último fresco como una rosa se fue al instante y Samu prefirió repostar un poco más, que bien nos trataron los voluntarios. GRACIAS.

Cuando me di cuenta Samu había desaparecido, pedí a Joan Carles por el y me dijo que seguro que se había ido sin decir nada, así que fui en su búsqueda, ir a su lado te asegura unas risas, la subida la hice tranquilo, sabía que era uno de los puntos clave donde había poco que ganar y mucho que perder, al llegar al asfalto me encontré con Ernesto, el pobre tenía problemas de rodilla que le duraría el resto de la jornada, me comentó que Samu no había pasado, entonces, donde estaba? y que a Rafa tampoco le había visto, su mujer tampoco le había visto en el avituallamiento des Port des Canonge, yo no entendía nada.

En Valldemossa repostamos, ya no necesitábamos el frontal y eso te da mucha vida es como si comenzara una segunda mitad de una carrera. Ernesto y yo empezamos a caminar tira a tira hacia es cami de l´archiduc, nos encontramos con la chica que iba segunda y que estaba a punto de ser adelantada por otra, yo mantenía el mismo ritmo, subidas caminando y aprovechaba para hidratarme y las bajadas y llanos trotando suave, el problema es que cada vez me dolía más la barriga, tenía mal estar y me sentía incomodo.

Al llegar a Deia volví a cargar los bidones, comí algo y salí rumbo a Soller, le dije a María que no parara mucho tiempo en el avituallamiento, que las chicas no la habían visto y que estaba en puestos de podio, que ya pararía en Soller, a la catalana se la veía fuerte pero la Suiza estaba peor que María así que tenía que arriesgar.

Me tomé con calma este segmento pensando que quizás disminuiría el dolor de barriga pero al contrario cada vez me encontraba peor, intentaba vomitar y no podía, al llegar a Soller me obligué a sentarme y comer aunque me costara, tome arroz, fruta, agua y coca cola, llene los bidones y cuando llegó Rafa le comenté que me encontraba tan mal como el que caminaría hasta recuperarme, que me siguiera, el se quedó algo mas en Soller, la subida al Barranco fue tétrico, parecía un cadáver andante, no podía con mi alma, me encontraba muy mal y la cabeza me dijo basta, me senté en unas rocas un par de veces y la gente me animaba, me indicaban que Rafa iba peor que yo pero que también estaba sentado, decidí esperarlo para así animarnos y llegar juntos a Cuber, pactamos retiranos en ese avituallamiento.

100 mts antes de coronar es coll de l´Ofre tenía a Rafa a unos 20 mts, yo sólo pensaba en llegar a Cuber ya que esa era mi meta, trote como pude en la bajada hacia el embalse y en el llano también corrí tramos. Al ver las carpas y tantos voluntarios era como ver un Oasis en el desierto, además había pera, jugosa y dulce, empecé a tragar peras como un loco, hasta entonces sólo había visto naranja y plátano y nada de frutos secos.

Me senté fuera de la carpa donde había sombra y una vez más me autoengañé: "Román, sólo queda una subida y una bajada y estarás en LluchLluch ni que sea a rastras llegaré a Pollensa" así que pedí ayuda para que me levantaran, no corrí ni un paso hasta lluch, la gente me animaba y me ofrecían geles... pero mi barriga no estaba para nada, pasito a pasito hacíamos camino. Biel Veret estaba cerca de la cima des Coll des Prat también tocadito, encontré a varios corredores que habían vomitado o que se encontraban en una situación parecida a la mía.

Al llegar a Lluch comí contra mi voluntad algo de pasta, bebí un poco y me tumbé, tenía mucho sueño, me encontraba débil, llegó Ernesto con mucho dolor de rodilla y decidió abandonar, pasaron muchos compañeros y me iban informando de como venía Carmen, Rafa, Samu... decidí esperarlos para así que si hiciera mas ameno el camino de Pollença, para mi el mas aburrido del Ultra.

De piernas yo iba algo mejor que Carmen y Rafa y les propuse hacer cacos largos sobretodo en el tramo de asfalto ya que 8 Km se hacen muy largos, los 3 dimos mucho de nosotros y nos entendimos a la perfección, al llegar a meta os aseguro que ninguno de los 3 estábamos contentos por haber llegado, no así.

Estas carreras las haces para disfrutar, o como un reto, o bajar marca, o por conocer algo nuevo, pero nosotros no cumplíamos ninguno de esos requesitos. No estábamos disfrutando, nos encontrábamos mal, no conocíamos nada nuevo y nuestra marca no estaba ni por asomo en lo que nos merecíamos después de tanto entreno.

Ahora y a balón pasado es fácil decir que lo importante es llegar a meta, yo creo que no, lo importante es pasárselo bien y si sufres pues no pasa nada por retirase, tenemos muy sobre valorado lo de ser finisher, hay que luchar por ello pero no comprometer nuestra salut y aunque la jugada nos salió bien, os aseguro que podría haber sido alrevés, lo más sensato habría sido abandonar y recuperarse.

Al llegar a meta me tumbé en el suelo, luego vomité y me sentí algo mejor, eche de menos el avituallamiento de meta del año pasado, nugets, pasta, patatilla... pero es verdad que quizás estábamos mal acostumbrados, en ninguna carrera te daban tanto por tan poco, este año hemos disfrutado de unos parajes inigualables con unos avituallamientos perfectos para esta prueba, no estaban a la altura de las otras ediciones tal como comentábamos todos pero es que lo de las otras ediciones repito que tampoco era normal, por eso siempre había pérdidas.

Ahora ya luzco mi prenda finisher, porque no, la he acabado y me la he ganado, estoy muy orgulloso de haber acabado mi 4ª ultra de 4 intentos, pero mi cabeza esta saturada y necesito cambiar de aires, disfrutar con el deporte y hace mucho que el correr no me hace feliz, creo que en las siguientes carreras voy a hacer la competencia a Marga y me convertiré en fotógrafo, os animaré y os acompañaré si alguien está mal, es otra forma de vivir este mundillo y para mi es una forma aún más divertida que llevando el dorsal.



Enhorabuena a todos los que han participado, a los finishers porque no ha sido fácil, a los retirados porque aún es más difícil abandonar después de invertir tantas horas e ilusión, a los organizadores por tantos meses de trabajo para tener un circuito tan precioso, espero que el año que viene sea a la inversa y poder disfrutar de las vistas del Sur que ya las echamos de menos, a los voluntarios porque os aseguro que sois los mejores de todas las ultras y a mis amigos porque les he visto sufrir mas que nunca y luchar por conseguir su meta.

Nos vemos en la playa, o en un chiringuito o haciendo una parrillada o una torrada, es hora de disfrutar la otra cara de la vida.

LARGA VIDA AL UMSDT

1 comentario:

Luciano dijo...

Soy el que te saludó en Deia, que nos habíamos conocido en la cena previa del GR10. He encontrado tu blog un poco por casualidad porque no me acordaba de tu nombre.
No me imaginaba que lo habrías pasado tan mal en el UMSDT, vaya tela con la deshidratación y los vómitos. Yo, por suerte, no tuve ningún problema en ese sentido y, quitando algunos momentos de agotamiento, la disfruté mucho.
¡Lo que me ha dejado a cuadros es que una semana después tu mujer y tú os cascárais otro ultra!
Bueno, ya nos veremos por ahí.